Llorch Talavera nació en Granada allá por 1.979 y desde entonces ha dedicado toda su vida a que alguien, el día de su muerte, le obsequie con un bonito epitafio.

Amante de la música ¹ y el cine ², de los libros ³ y los viajes absurdos ⁴, piensa que hasta la fecha sus mejores momentos han sido tocando sobre un escenario, escribiendo Porta Coeli Zombi o recorriendo el maravilloso Transmongoliano.

A Llorch Talavera le apasiona escribir y resulta desconcertante que hasta la fecha apenas haya publicado nada. En 2.009 ganó el Concurso de Cuentos Fantásticos y de Terror Idus de Marzo con el relato Cuadríptico de muerte e ironía, y desde entonces nada más se ha sabido de él.

Pero Llorch Talavera piensa que ha llegado el momento de cambiar todo esto. Cual pastorcillo de Fátima, ha sentido la Llamada y ahora está dispuesto a dar un golpe en la mesa, beberse un chupito de pisco y gritarle al mundo: «¡Aquí estoy yo!».

Sin duda, al hablar de Llorch Talavera nos encontramos con el absoluto desconocido más famoso de la historia y, sin duda —una vez más—, las personas que se atrevan con este Porta Coeli Zombi sabrán reconocerlo… ¡Pasen y vean!

1. ¡Larga vida al rocanrol y Franco Battiato!
2. Desde los grandes taquillazos de Hollywood hasta el mejor cine gafapasta europeo.
3. Llorch Talavera lee, escribe e incluso se ha atrevido a editar… ¡Este chico es increíble!
4. Perú, Rusia, China, Bolivia, Mongolia, Serbia, Moldavia, Marruecos, Finlandia, Albania… ¡Hasta Portugal!